Imagen: El Nacional
Un grupo de migrantes que llegaron en el ultimo año a Nueva York y que viven en El Bronx recibieron este jueves una bicicleta, donadas por neoyorquinos, como parte de una iniciativa de ONGs y la Alcaldía de la ciudad que se puso en marcha este año para que les sirvan de herramienta de trabajo y puedan así ayudar a su familias.
La idea del programa piloto «Bicicletas para solicitantes de asilo» surgió de la ONG Bike New York, que ofrece programas gratuitos de educación sobre bicicletas, a la que se sumó la Oficina para Asuntos del Inmigrante y el Departamento de Transporte de la ciudad para proveer a los recién llegados con este medio de transporte.
Organizaciones que proveen servicios a inmigrantes eligen a las personas que recibirán la donación, explicó a EFE Jairo Guzmán, presidente y fundador de Coalición Mexicana, que tiene su sede en una iglesia en una comunidad de bajos recursos en El Bronx donde hoy se hizo la entrega a seis mujeres y seis hombres.
Algunos viven en refugios y otros en apartamentos donde comparten la vivienda con varias familias «y están ansiosos por poder tener un trabajo y facilidad para moverse», dijo Guzmán.
Estas personas habían acudido a la organización en busca de ayuda; una vez conocidas sus historias la ONG eligió a doce beneficiarios que hoy recibieron sus bicicletas, debidamente puestas a punto; además, se entregó a cada ciclista un casco y un candado para protegerlas de robo.
Podría interesarte: Qué entienden por ovni en el Ejército de Estados Unidos y cómo los clasifican
Bicicletas para transportar tamales
La mayoría de las mujeres que recibieron este jueves la bicicleta son vendedoras ambulantes, entre ellas Agustina, mexicana que vende tamales frente a la iglesia y dice que ahora podrá llevar su producto a otros lugares en El Bronx en lugar de quedarse «esperando a ver quién se detiene a comprar».
Aleida, una guatemalteca de 22 años de edad que llegó hace tres meses a Nueva York junto a su esposo e hija de tres, dijo a EFE que la bicicleta le permitirá comenzar a trabajar haciendo entrega de comidas.
«La quiero para trabajar ya que eso me permitirá llevar un plato de comida a mi hija», y ayudar a sus familiares en Guatemala a pagar el préstamo que hicieron para pagar al cartel que les secuestró (a ella, su esposo e hija) cuando llegaron a México, dijo la inmigrante, que vive en un albergue en El Bronx y acudió acompañada por la niña.
Aleida lamentó además que los 10.000 quetzales, unos unos 1.273 dólares del préstamo que tuvo que pedir al banco se convirtieron en el doble a la hora de devolverlo. «Eso es mucho dinero», afirmó.
El mexicano Manuel Castro, comisionado de la Oficina para Asuntos del Inmigrante, se mostró complacido de la iniciativa que les permite ayudar a los inmigrantes «en su viaje para cumplir su sueño americano» y de los neoyorquinos que han donado las bicicletas.
Como parte de esta iniciativa ya se han donado 200 bicicletas de las que la mitad han sido ya distribuidas.
Con información de EFE.-