Según un comunicado difundido este domingo por el Pentágono, Austin se sometió a una cirugía el 22 de diciembre, regresó a su casa un día después y tuvo que ser ingresado en cuidados intensivos el 1 de enero en el Centro Médico Militar Nacional Walter Reed de Bethesda, Maryland, al presentar fuertes dolores. Foto: Twitter @SecDef.
Este fin de semana se conoció que el secretario de Defensa de Estados Unidos, Lloyd Austin, estuvo hospitalizado desde el pasado lunes 1 de enero por complicaciones derivadas de una cirugía a la que se sometió. Sin embargo, este hecho no sería relevante si no fuera porque su estado no se le comunicó de inmediato ni al presidente Joe Biden, ni el secretario de Estado Antony Blinken, así como tampoco a la funcionaria que estaba sustituyendo a Austin en su ausencia.
Según un comunicado difundido este domingo por el Pentágono, Austin se sometió a una cirugía el 22 de diciembre, regresó a su casa un día después y tuvo que ser ingresado en cuidados intensivos el 1 de enero en el Centro Médico Militar Nacional Walter Reed de Bethesda, Maryland, al presentar fuertes dolores.
El comunicado, emitido por el mayor general de la Fuerza Aérea Pat Ryder, no ofrece mayores explicaciones sobre el procedimiento médico al que fue sometido el secretario de Defensa o las causas que lo llevaron a terapia intensiva. Sólo se limita a decir que fue colocado allí “debido a sus necesidades médicas, pero luego permaneció en ese lugar en parte debido a consideraciones de espacio hospitalario y privacidad”, según citó The Associated Press.
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Notificación tardía
Austin, de 70 años, se encuentra inmediatamente detrás del presidente Joe Biden en la cadena de mando del Ejército estadounidense y desempeña un papel central en los numerosos escenarios en los que Estados Unidos está implicado militarmente en todo el mundo, como son el conflicto entre Israel y Hamás, los ataques de los hutíes en el mar Rojo o la guerra en Ucrania.
En tal sentido, resulta relevante y poco transparente que su estado médico no haya sido revelado de inmediato ni a la Casa Blanca, el Consejo de Seguridad Nacional o a la subsecretaria de Defensa, Kathleen Hicks, quien estaba de vacaciones en Puerto Rico.
Ryder explicó en el comunicado que todos ellos fueron notificados de la situación médica de Austin el jueves 4 de enero, tres días después de su ingreso a cuidados intensivos. Según Ryder, la jefa de personal de Austin, Kelly Magsamen, estaba enferma y “no podía hacer notificaciones antes de esa fecha”. No fue sino hasta el jueves que ella informó a Hicks y al asesor de seguridad nacional, Jake Sullivan.
En un comunicado publicado el sábado por la noche, Austin asumió la responsabilidad por los retrasos en la notificación.
“Reconozco que podría haber hecho un mejor trabajo asegurándome de que el público estuviera debidamente informado. Me comprometo a hacerlo mejor”, dijo. “Pero es importante decir esto: este fue mi procedimiento médico, y asumo toda la responsabilidad de mis decisiones sobre la divulgación”.
Fuente: Club de Venezolanos / Con información de The Associated Press, por Tara Corp, Colleen Long y Kevin Freking. Si desea leer la publicación original puede hacerlo en el siguiente enlace: El Pentágono agrega nuevos detalles sobre la estadía en el hospital del secretario de Defensa y se demora en informar a Biden | AP Noticias (apnews.com)
